“Mi vida, ha sido una vida de lucha y de resistencia a la opresión”, aseveró Carlos “Perro” Santillán, al responder a críticas realizadas por sectores de la oposición interna del SEOM, tras lo cual ratificó su compromiso de trabajar por un sindicalismo que respete las bases.“Cuando uno es un esclavo, no hay punto tan ruin al cual no sea capaz de arrodillarse con tal de granjearse el favor de su amo. Son capaces de cualquier cosa, de inventar mentiras, de conspirar, de echar un manto de sospecha sobre los que nunca hemos estado dispuestos a arrodillarnos ante el poder”, sostuvo.
“Y con esa misma mente de esclavos, ahora vienen a tratar de ensuciar nuestra historia de lucha, que todo el pueblo de Jujuy conoce. ¿Quieren hablar de nuestros procesamientos? Muy bien, lo hagamos. Las causas y procesamientos que he tenido, con mucho orgullo los he sufrido. Porque con orgullo defendí a los trabajadores, con orgullo resistí al poder y con orgullo prioricé a mis compañeros por sobre cualquier interés personal”.
“Tuercen la historia, acusándome de abandonar a mi gente, pero todos saben que desde el puesto de lucha en el que milito desde hace años, jamás dejamos en banda a los compañeros. Mientras estos tiernitos aprendían a comer de las migajas que sus amos les arrojaban al piso, nosotros hemos agigantado nuestra comprensión, compromiso y acción en la lucha social, en un espectro amplio y desafiante como los derechos humanos. Para nosotros, los años no pasaron al vicio”.
“Pobres esclavos, pobres necios. Dicen que están haciendo historia. Si hacer historia es entregar envueltos y con moño a los trabajadores, a una patronal que siempre nos ha pisoteado, que cada uno elija si quiere ser parte de esa historia. Yo creo que el SEOM no es eso. El SEOM es lucha, es coraje y es renunciamiento. Es por ese renunciamiento que acepté el pedido, casi exigencia, de los compañeros municipales, para volver a tomar las riendas de este sindicato. No lo hago por mí, como sí lo hacen esos que ahora quieren adquirir con dádivas el título de dirigentes, sin haber aprobado ninguna materia. Son porros en la escuela de las luchas sociales, necesitan que alguien les dicte lo que deben decir, necesitan estar bajo el paraguas de alguien que les dé para el sandwich y la gaseosa.
“Y por eso, lo real acá es que están cambiando de amos y ahora quieren entregar el gremio en manos de aquellos que compran la militancia con casas, autos y dinero. Quieren entregar el gremio en manos de los violentos, de los grandes delincuentes que tiene Jujuy, de los que someten al pueblo en nombre del pueblo”.
“Nosotros, y que les quede claro a todos: no prometemos puestos de trabajo, casas, autos ni bolsones. Lo único que prometemos es un puesto de lucha. Es en esa coherencia que vamos a seguir dando batalla desde la honestidad. Honestidad por partida doble, no sólo en lo material, sino en los principios que jamás hemos abandonado”, finalizó.
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